(Fuente de la imagen: http://www.dosisdiarias.com/)Facebook, esa red social con más de 100 millones de usuarios ha revolucionado Internet y se ha convertido en un fenómeno sociológico digno de estudio. Cada vez somos menos los que no formamos parte del "clan",
outsiders que nos resistimos a entrar en un mundo virtual repleto de chafarderos y narcisistas (no lo digo yo, lo dice un
estudio de la Universidad de Georgia).
Son algunos los hechos que me hacen desconfiar de Facebook, y de lo que realmente se deriva de esta gran plataforma. A continuación presento algunos de estos hechos.
1. Derecho al honor y a la intimidad personal (artículo 18.1 de la Constitución Española)
Un día me entero en una cena que, a pesar de no formar parte de Facebook, se están publicando fotos pretéritas de mi persona, que tal vez a mi no me interesa que sean mostradas. ¿Cómo puedo yo ver qué fotos se están colgando y lo peor, qué amparo tengo para que sean retiradas sin ser usuario de Facebook? La respuesta: no puedo hacer nada. Como mucho llamar al que las colgó para que las retire y en caso extremo, tirar por la vía judicial. Así pues, mi derecho al honor y a la intimidad se ve fácilmente vulnerado sin que yo disponga de mecanismos tangibles de defensa.
Por lo que sé, pasa algo similar con los usuarios de Facebook. Cualquier usuario puede subir una foto en la que aparezca otro usuario sin su consentimiento, incluso puede introducir el nombre de éste en la fotografía. El que aparece en la foto sin haberla colgado puede eliminar el tag con su nombre pero no la foto en si. Como mucho, puede denunciarla y esperar. En ese caso, ¿cuánto tiempo tarda Facebook en revisar el total de fotos denunciadas y qué criterios sigue para eliminar aquellas que cree inadecuadas?
Sé que seré criticado por estos comentarios atendiendo al hecho de que dispongo de un blog donde publico fotos en las que aparecen otras personas. Ahora bien, siempre he tratado de ser muy cuidadoso en este tema y jamás he colgado una foto que dañara la imagen de otra persona. La prueba es que nunca nadie me ha pedido que retire una foto del blog.
2. Privacidad
La privacidad es algo que muchos usuarios no cuidan en Facebook. La publicación de datos personales e información de interés puede jugar en su contra. Asimismo, agregar a contactos sin conocer quién hay en el otro lado puede conllevar problemas. Un ejemplo bien claro de estas prácticas lo tenemos en
el experimento que realizó la empresa Sophos. Se creó una cuenta ficticia para “Freddi Staur”, una pequeña rana verde de plástico que divulgó mínima información sobre ella misma, y se enviaron 200 invitaciones aleatorias. El resultado: 87 de los 200 usuarios de Facebook contestaron a Freddi, de los cuales 82 facilitaron información personal, es decir, el 41%.
¿Qué problemas puede generar este caso? Entre otros, fraude de identidad, expansión incontrolada de nuestros datos personales o la posibilidad de que una empresa nos espíe antes de tomar la decisión sobre nuestro futuro empleo. Detrás de la "rana amiga" se pueden esconder cosas que desconocemos...
3. ¿Tirar la caña desde Facebook?
Hay otro tema relativo a Facebook que no es peligroso pero que despierta mi interés. En España y en Catalunya por lo general, los chicos tienen más amigos que amigas y las chichas tienen más amigas que amigos. Son hechos resultantes de nuestra educación y herencia de nuestra historia social y política. ¿Qué pasa en Facebook? Una realidad algo diferente. La mayoría de usuarios mantienen bastante equilibrado el número de contactos "chicos" y "chicas". Es más, en muchos casos, el sexo contrario domina el número de contactos. ¿Por qué será eso? ¿Cuál es la explicación? Es bastante obvio... y es que "buitrear" desde casa y desde el trabajo a través de Facebook resulta más fácil y barato que hacerlo en un bar o en una discoteca. O al menos, es un complemento perfecto para preparar las "faenas"...
Para ir acabando, creo que Facebook tiene una parte útil y aprovechable, basada en el reencuentro de personas del pasado y en el mantenimiento del contacto de aquellas personas que conforman el núcleo social de un individuo. A esta parte atractiva e inofensiva, se le suman otras de negativas, relativas a los posibles ataques que se puedan dar sobre la intimidad, el honor y la privacidad de los usuarios y los no usuarios.
Existen muy pocas medidas de protección frente a la copia de los datos personales y frente a la invasión de la intimidad de las personas. Esa escasez de medidas hacen necesaria una regulación inmediata de las redes sociales virtuales como Facebook. Los casos punibles y los delitos van a empezar a proliferar en breve y la reacción llegará demasiado tarde.
P.D: Me reservo otro
post para hablar de
Linkedin, red de la cual formo parte y que me merece más respeto que Facebook.